En el 2013, en una tienda de productos de segunda mano del barrio de San Bernardo, Madrid
(Cashconverters), adquirí la cámara Sony NEX-3, maravilla tecnológica, pequeña,
liviana y con un sensor de una réflex. La utilización de esta cámara, así como
también la Panasonic LX5, me conducirán a un nuevo mundo de posibilidades
creativas, que cambiarían mi destino.
Hasta ese año, mis capturas eran hechas con cámaras compactas, tabletas o móviles y aunque habían avanzado tecnológicamente, presentaban graves problemas de ruido o definición, por sus sensores tan pequeños y sus objetivos de mala calidad.
Ese mismo año (2013) comienzo hacer mis primeros reportajes con estas cámaras y a utilizar el revelado digital. La diferencia está a simple vista. Marcus Populus.
Hasta ese año, mis capturas eran hechas con cámaras compactas, tabletas o móviles y aunque habían avanzado tecnológicamente, presentaban graves problemas de ruido o definición, por sus sensores tan pequeños y sus objetivos de mala calidad.
Ese mismo año (2013) comienzo hacer mis primeros reportajes con estas cámaras y a utilizar el revelado digital. La diferencia está a simple vista. Marcus Populus.